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Huelga de hambre por ley migratoria continuará “hasta que el cuerpo aguante”

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Por: Paula T. Castellanno
Washington DC.-
Huelga de hambreLa decena de huelguistas de hambre que piden frente al Capitolio que el Congreso apruebe lo antes posible una reforma migratoria pasarán el día de Acción de Gracias solo con agua y aseguraron hoy que pese a la debilidad seguirán “hasta que el cuerpo aguante”.

La tiendas con las que acampan frente a la colina del Capitolio se llenaron hoy de líderes religiosos, activistas y ciudadanos que quisieron mostrar el apoyo al ayuno voluntario que va por su día 15 y seguirá incluso mientras Estados Unidos celebra el banquete de Acción de Gracias.

“Lo que nos mueve es el hambre de justicia”, aseguró Eliseo Medina, miembro del Sindicato Internacional de Trabajadores de Servicios (SEIU, en inglés), quien ya ha perdido 20 libras y está visiblemente más delgado que cuando comenzó.

“Cualquier sacrificio es poco y no es comparable al de los inmigrantes que dejan la vida en el desierto buscando un futuro mejor o cuyas familias sufren las deportaciones”, reflexionó Medina.

Los organizadores hicieron un llamamiento para que ciudadanos en todo Estados Unidos se unan a su ayuno entre el 1 y 3 de diciembre y pidan al presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, que dé marcha atrás y desbloquee el camino hacia una reforma migratoria que regularice a 11 millones de personas.

“Pedimos al pueblo estadounidense que eleve su voz colectiva para aunar fuerzas y convencer a los políticos que el momento de actuar es ahora”, indicó Medina, uno de los líderes de la protesta.

La huelga de hambre frente al Capitolio comenzó justo un día antes de que Boehner asegurara que los republicanos de la Cámara de Representantes no iban a debatir en lo que queda de año la reforma migratoria, lo que retrasa aún más un proyecto de ley que ya tenía el visto bueno del Senado.

“La reforma migratoria es algo imparable”, aseguró Medina, quien pidió a Boehner que “deje de querer tapar el Sol con un dedo” y “mire dentro de su corazón” para que se ponga fin a la vida en las sombras de millones de trabajadores y de familias que viven desunidas.

“Lo que nos importa es el resultado no cómo se llegue a él”, indicó Medina en referencia a la petición de Boehner de que se aborde el proyecto de ley “por partes”, una demanda a la que ha accedido el presidente Barack Obama, pese a que exigía un debate legislativo “integral”.

“Rezamos para que Boehner entienda la urgencia moral de este momento”, indicó Medina, que a sus 67 años asegura que el ayuno ha aumentado su “debilidad”, pero no su determinación para ir hasta el final de sus fuerzas.

El pequeño grupo de huelguistas de hambre, entre los que se encuentran religiosos, inmigrantes indocumentados o activistas de minorías como la asiática, han recibido el apoyo de centenares de personas que se han unido por períodos cortos de tiempo al ayuno en la explanada del “National Mall”.

Salvador Rodríguez, que se sumó a la huelga de hambre hace cuatro días, explicó a Efe cómo importantes políticos estadounidenses que han visitado el campamento, entre ellos el vicepresidente, Joe Biden, y el secretario de Trabajo, Thomas Pérez, han salido emocionados y “con lágrimas en los ojos”.

Medina y todos lo que se han ido sumando a la huelga de hambre recibieron hoy a los visitantes con buen ánimo y bajo el constante tamborileo de la lluvia en la carpa que los protege del temporal de frío que atraviesa desde hoy la costa este del país.

En las tiendas han acumulado mensajes de apoyo, imágenes de Gandhi o César Chávez y han levantado un pequeño altar a la virgen de Guadalupe para rezar y pedir que los políticos que trabajan a pocos metros de la acampada entiendan la importancia de regularizar la situación de familias separadas o personas que trabajan y son tratadas como ciudadanos de segunda clase.