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Trabajadoras domésticas y campesinas exigen más protecciones contra acoso y abuso sexual en sitios laborales

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Por: El “Buho T”
Washington DC.-

Trabajadoras

Las trabajadoras domésticas, campesinas o que limpian habitaciones de hotel con frecuencia trabajan solas, sin testigos, por lo que sus denuncias se vuelven, explicó Cazorla, su palabra contra la de los abusadores.

Las mujeres que cuidan niños y ancianos, limpian casas, hoteles y oficinas, o que trabajan el campo, corren mayor riesgo de ser víctimas de acoso y abuso sexual, y, si son indocumentadas, tienen el agravante de no denunciar el delito por temor a la deportación. Por ello, bajo amenaza de lluvia, más de un centenar de activistas realizaron una protesta frente al Capitolio y visitaron más de 60 oficinas en el Congreso para “despertar conciencia” sobre un problema que las mantiene “invisibles”.

Secándose lágrimas de rabia y dolor por el acoso sexual que sufren miles de trabajadoras, la mexicana Teresa Arredondo se sumó este martes a más de un centenar de activistas para exigir un cese al acoso y abuso sexual y más protecciones para las trabajadoras domésticas y campesinas en todo Estados Unidos.

“Mi vida no ha sido fácil. He sufrido el acoso sexual por años, por parte de dueños, supervisores, contratistas, incluso hasta de trabajadores… el Congreso tiene que darnos alguna ley que nos cuide, nos proteja de esos acosadores y depravados que solo van a ver qué agarran”, dijo Arredondo, campesina en Bakersfield (California), y madre de dos hijos.

La protesta se llevó a cabo en el marco del “Mes de la Concientización sobre el Acoso Sexual”, aprovechando el impulso del movimiento “#MeToo” de 2017, que brotó de la ola de acusaciones de acoso y abuso sexual contra celebridades de Hollywood o figuras políticas.

Las activistas, en su mayoría latinas, participaron en el ““Día de Acción Imparable”, organizado por la Alianza Nacional de Trabajadoras del Hogar (NDWA, en inglés) y la Alianza Nacional de Campesinas, para rendir testimonios ante el Congreso y exigir medidas de protección para las mujeres en todo sitio laboral.

Millones de campesinas, niñeras, limpiadoras, o que trabajan cuidando de otros en casa, realizan “una labor que sostiene la vida en esta nación, y sin embargo estas mujeres han afrontado una exclusión sistemática de protecciones laborales”, observó Ai-jen Poo, directora de la NWDA.

En concreto, las activistas pidieron cerrar las “lagunas legales” en las leyes, para que se castigue el acoso y abuso sexual en los empleos; simplificar el proceso de denuncias; más recursos para víctimas que no hablan inglés, y la inclusión de trabajadoras domésticas y campesinas en leyes contra el acoso sexual.

También pidieron que el Congreso enmiende el “Título VII del Acta de Derechos Civiles de 1964, que prohíbe la discriminación por género, raza u origen nacional, pero no aplica a empresas con menos de 15 empleados.

La legisladora demócrata por Washington y ex activista de la campaña “We Belong Together”, Pramila Jayapal, explicó a este diario que su oficina estudia varias opciones para fortalecer las protecciones laborales.

“Estamos haciendo una lista de las formas en que podemos responder a esta situación, un conjunto de medidas, legislaciones, cambios administrativos. Hay leyes que no se aplican, por ejemplo, como sucede con la EEOC (Comisión de Oportunidades Equitativas en el Empleo), que no tiene recursos, hay programas que se han traducido a otros idiomas… hay mucho que hacer”, dijo Jayapal.

“Nos preocupa lo de las mujeres indocumentadas porque no hacen denuncias o exigen justicia si temen por su estatus migratorio. Tenemos la posibilidad de ayudar a millones”, enfatizó.

En la actualidad, sólo ocho estados han adoptado leyes enmarcadas en una especie de “Carta de Derechos de las Trabajadoras Domésticas” pero “hace falta más” para ampliar esas protecciones en todo EEUU, dijo Marzena Zukowska, portavoz de NDWA.

“Queremos sentar las bases para una ley federal más amplia, una Carta de Derechos a nivel federal; sería algo muy histórico, porque protegería a entre dos millones y tres millones de trabajadoras del hogar en EEUU, y millones de campesinas y mujeres que trabajan para sitios pequeños”, señaló.