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Viernes, 22 de Noviembre del 2024
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Kim Kardashian “atada y amordazada” en Paris pensó que iban abusar de ella

Kim Kardashian

Kim Kardashian fue “atada y amordazada” en un hotel de París el domingo por la noche mientras la retenían a punta de pistola cinco hombres disfrazados de policías.

Kim Kardashian fue “atada y amordazada” en un hotel de París mientras la retenían a punta de pistola cinco hombres disfrazados de policías. Dado que el hotel es conocido por su discreción cuando aloja a personajes famosos, uno se pregunta cómo consiguieron los ladrones rastrear la ubicación exacta de Kardashian. Los Kardashian ya habían expresado públicamente en el pasado la preocupación de que Snapchat pueda revelar públicamente su ubicación.

Empecemos por los hechos. La estrella de la telerrealidad estaba en París por la Semana de la Moda y se alojaba en la residencia privada de Kanye West en el Hotel de Pourtalès. Kardashian pasó la noche en un evento de Givenchy y aparentemente estaba sola en su habitación cuando los asaltantes vestidos como agentes de policía obligaron al portero a abrir la puerta de su habitación. A continuación, los ladrones pusieron una pistola en la cabeza de Kardashian antes de atarla, amordazarla y meterla en la bañera. Después, los enmascarados robaron más de $10 millones en joyería, incluido el anillo de boda comprado por West. Cuando se fueron, Kardashian pudo liberarse y pedir ayuda.

Los ladrones siguen en libertad.

El atraco, obviamente, estuvo muy bien planificado. Según el New York Post, los ladrones irrumpieron en la residencia privada de Kim y Kanye y “sabían exactamente en qué habitación” se encontraba la actriz. Es sabido que Kim y Kanye frecuentan su residencia en el Pourtalès, pero las actualizaciones de sus redes sociales parecían demostrar que estaba allí la noche del robo. Por ejemplo, cuando se preparaba para el show de Givenchy durante la tarde del domingo, Kardashian publicó una serie de historias de Instagram para la revista Vogue.

La estrella del reality de 35 años estaba en la cama en el apartamento de dos pisos cuando escuchó hombres subir las escaleras con botas. Vio a uno de los ladrones por una puerta vidriada y trató de llamar a su seguridad pero le quitaron el teléfono de las manos por los hombres y comenzaron a atarla, le pusieron esposas de plástico alrededor de las manos de Kim y luego le pusieron cinta adhesiva para que quede seguro. Cuando agarraron sus tobillos, Kim pensó que iba a ser violada, le dijo a la policía, Los tobillos de Kim estaban con atados con cinta y luego la levantaron y la pusieron en la bañera. Les rogó que no la lastimen diciendo que era una madre y que se llevaran lo que quisieran. Todo lo que ella entendía era que los hombres le decían “anillo, anillo” y les dijo donde podían encontrar lo que estaban buscando. Luego de que Kim continúe gritando y llorando, le pusieron cinta en la boca.