17 Detenidos en nueva acción de desobediencia civil contra deportaciones
- Detalles
- Categoría: Inmigración
- Publicado el Sábado, 14 Junio 2014 11:07pm
Por: Paula T. Castellanno
Washington DC.-
Un total de 17 personas, entre ellos varios menores, fueron detenidos hoy por participar en un nuevo acto de desobediencia civil frente al Congreso, en Washington, en protesta por el aumento de las deportaciones de indocumentados. El Movimiento por una Reforma Migratoria Justa (FIRM, por sus siglas en inglés) organizó esta protesta para pedir a los políticos de Washington un compromiso político que ponga fin a la separación de familias trabajadoras indocumentadas.
Las familias que participaron en esta acción se trasladaron a las oficinas del presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner; del líder de la mayoría republicana, Eric Cantor, y del que se espera que sea su sustituto en ese puesto, el coordinador de la bancada republicana, Kevin McCarthy.
La protesta se produjo precisamente el mismo día en que Cantor anunció su renuncia a su puesto de líder de la mayoría, tras perder en las primarias de su distrito electoral frente a un candidato del ultraconservador “Tea Party”, que entre otras cosas criticó la disposición de su rival a avanzar en una reforma migratoria.
“Para nuestras familias, que viven a diario el insoportable miedo de perder a su seres queridos, estas acciones nos permiten protestar contra un sistema roto que separa a familias”, explicó en un comunicado, Kica Matos, portavoz de FIRM.
Organizaciones de inmigrantes en Estados Unidos llevan meses organizando acciones de desobediencia civil que desembocan en arrestos para protestas por el bloqueo en la prometida reforma migratoria y el continuo aumento de las deportaciones. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y los principales líderes del Senado han apoyado una reforma migratoria que incluya un camino hacia la regularización para 11 millones de indocumentados que se calcula hay en el país, pero la Cámara de Representantes y las inminentes elecciones legislativas de noviembre han atascado los avances.
En los últimos seis años, la Administración de Obama ha deportado a más de 2 millones de personas y con el estancamiento de la reforma migratoria en la cámara baja del Congreso, los grupos proinmigrantes consideran que la única solución es que el gobernante utilice su poder Ejecutivo para resolver la crisis migratoria del país.