El Senador Jeff Sessions No aprende Las Lecciones Migratorias
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- Categoría: Inmigración
- Publicado el Sábado, 4 Mayo 2013 2:53pm
Por: America’s Voice
La Corte Suprema de Estados Unidos rechazó ayer la apelación de Alabama que solicitaba la reconsideración de la ley antiinmigrante HB 56 que capturó la atención nacional e internacional por sus cláusulas draconianas de autodeportación y de indagar el estatus migratorio de niños de edad escolar. Desde una perspectiva política, económica y moral, la ley de Alabama y su visión de “autodeportación” es prueba y ejemplo contundente de lo que no debe contemplar una política migratoria.
Sin embargo, pese a las críticas generales y la atención negativa que provocó esa ley, no todos han aprendido las lecciones del experimento fallido de Alabama. De hecho, el propio senador de Alabama, Jeff Sessions (R-AL) – ferviente promotor de la HB 56, quiere aplicar las fallidas tácticas de Alabama en la política migratoria nacional. En las vistas del Comité Judicial del Senado la semana pasada, Sessions le dio la bienvenida a sus aliados del movimiento antiinmigrante: Kris Kobach, secretario de estado de Kansas, asesor migratorio del candidato presidencial republicano de 2012, Mitt Romney, y responsable de la estrategia de “autodeportación” y autor de las leyes anti-inmigrantes SB 1070 de Arizona y HB 56 Alabama; y Mark Krikorian, director ejecutivo del antiinmigrante Center for Immigration Studies (CIS), y autor intelectual de la estrategia de “autodeportación”.
Frank Sharry, director ejecutivo de America’s Voice Education Fund, dijo que “es verdaderamente extraordinario que después de todas las consecuencias negativas generadas por el fracaso de la estrategia de “autodeportación” en las elecciones de 2012 y en su propio estado, Sessions insista en que esta postura sea adoptada como política pública a nivel nacional. Si la reforma migratoria fracasa y los proponentes de la “autodeportación” tienen éxito, el Partido Republicano tendrá que agradecerle al senador Sessions y a sus aliados anti-inmigrantes el haber sellado su suerte con los votantes latinos – de forma negativa – por generaciones”.
Aunque las cláusulas más onerosas de la HB 56 fueron frenadas en tribunales, sus efectos se dejaron sentir en la escasez de mano de obra que provocó pérdidas en la agricultura, y empresas extranjeras frenaron sus inversiones costándole millones al estado. Esto sin contar las violaciones de derechos civiles y humanos que se registraron. “Evidentemente el senador Sessions quiere lograr para los estadounidenses lo que la ley antiinmigrante de su estado hizo por la gente de Alabama. Está en manos del resto de la nación decirle al senador Sessions ‘no gracias’”.