La peligrosa ruta de los niños de Centroamérica que migran solos a EUA
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- Categoría: Internacional
- Publicado el Viernes, 20 Junio 2014 10:45pm
Tijuana, México.-
Salen de sus casas conscientes de que el camino será difícil y que se exponen a que Migración los deporte; sin embargo, se arriesgan a todo, con tal de encontrar una vida mejor para ellos y sus familiares. “Me llevaron a un cuarto muy grandísimo donde están revueltos chavos (chicos), chavas (chicas) y adultos. Ahí estuve cinco días”, cuenta un joven hondureño, capturado cerca de la frontera sur de México, por donde cruzó a la edad de 16 años.
Este chico, que salió de su país amenazado de muerte por pandilleros, permaneció dos meses en instalaciones de migración hasta que México le otorgó el estatus de refugiado. Ahora estudia sastrería y sueña con vestir a las estrellas de Hollywood algún día. Sueños compartidosGabriel no sueña con ser futbolista o cantante de rock. A sus 17 años, quiere trabajar de albañil en Estados Unidos para ser el sustento de su familia en México, aunque eso signifique aventurarse solo en un viaje clandestino lleno de peligros.
“Tienes que dormirte en el cerro, ir caminando todo el rato, bajadas, subidas. Los migras (Patrulla Fronteriza) te pueden ver o localizar por las huellas, y si te alcanzan todo es en balde”, cuenta este joven, unas horas después de haber sido deportado de Estados Unidos a la mexicana ciudad de Tijuana (noroeste) por tratar de cruzar la frontera ilegalmente.
Huyendo de la pobreza y la violencia, cada vez más niños y adolescentes de México y Centroamérica se aventuran completamente solos rumbo a Estados Unidos, un fenómeno que para el gobierno del presidente Barack Obama se ha convertido en crisis humanitaria. A lo largo de su ruta clandestina, los menores son acechados por bandas criminales, no sólo para extorsionarlos, secuestrarlos o venderlos a redes de prostitución, sino también para hacerlos parte de sus tropas. Antonio asegura que su “pollero”, como se llama a los traficantes de personas, parecía tan menor como él.
“Era un muchacho también”, dijo. “Se tiene registro de que muchos jóvenes son empleados para el tráfico de personas en las fronteras”, debido a que no son imputables ante la justicia, explica Javier Urbano, coordinador del Programa de Asuntos Migratorios de la privada Universidad Iberoamericana.
Hacia el lado este de la frontera las cosas se agravan. Ahí, los menores ya realizan extorsiones a migrantes e incluso participan de asesinatos, según un abogado de niños migrantes que pidió el anonimato.Si los menores son altamente vulnerables en su ruta, los peligros no se acaban una vez que quedan a resguardo de las autoridades, pues muchos temen ser devueltos a su lugar de origen, de donde salieron huyendo.
En los primeros cuatro meses de 2014, más de 6.000 niños y adolescentes mexicanos fueron deportados de Estados Unidos. Muchos de ellos habían intentado cruzar ya más de cinco veces. Superado por esta situación, el gobierno estadounidense habilitó tres bases militares como albergues para menores, mientras que el secretario de Seguridad Interna, Jeh Johnson, subrayó que los menores que han cruzado la frontera en los últimos meses no obtendrán estatus legal o ciudadanía, y que en cambio son considerados “prioritarios” para ser deportados.