1. Skip to Menu
  2. Skip to Content
  3. Skip to Footer
Sábado, 23 de Noviembre del 2024
| 10:25 pm

Síguenos en Las Americas Newspaper Facebook Las Americas Newspaper Twitter Las Americas Newspaper Google Plus

Papa pide reconciliación nacional en El Salvador

Salvador.-

El Salvador Papa

El arzobispo salvadoreño fue beatificado el sábado en San Salvador en una emotiva ceremonia que elevó al sacerdote a la categoría de beato.

El papa Francisco destacó el domingo una vez más la figura del arzobispo salvadoreño Oscar Arnulfo Romero, declarado beato en la víspera, de quien subrayó su entrega total por la causa de los pobres. Romero “eligió estar en medio de su pueblo, sobre todo entre los pobres y oprimidos, aún a costa de la vida”, señaló.

El arzobispo salvadoreño fue beatificado el sábado por la Iglesia católica en San Salvador en una emotiva ceremonia que elevó al sacerdote a la categoría de beato y mártir de la fe, treinta y cinco años después de que fuera asesinado. El Pontífice recordó a Romero tras el rezo del Angelus desde uno de los balcones del palacio pontificio del Vaticano, ante miles de personas que repletaron la plaza San Pedro.

El papa Francisco consideró este sábado que es “un momento favorable para una verdadera y propia reconciliación nacional” en El Salvador, con motivo de la beatificación del arzobispo de San Salvador, Óscar Arnulfo Romero, asesinado hace 35 años.

En una carta enviada al actual arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, el pontífice recordó la figura de Romero que, según él, “invita a la cordura y la reflexión” y muestra que es “necesario renunciar a la violencia de la espada” y del odio.

“Monseñor Romero, que construyó la paz con la fuerza del amor, dio testimonio de la fe con su vida entregada hasta el extremo”, escribió el papa.

La beatificación de Romero, asesinado por un comando de extrema derecha el 24 de marzo de 1980 mientras oficiaba misa, tiene particular importancia dentro de la Iglesia de América Latina, ya que de alguna manera encarna el modelo de religioso que propone el primer papa de la región.

Francisco, que ha mostrado en repetidas ocasiones su intención de presidir una Iglesia pobre para los pobres, considera a Romero, que supo “ver y oír el sufrimiento de su pueblo”, como un modelo. “En tiempos de difícil convivencia (...) supo guiar, defender y proteger a su rebaño”, recordó el papa. “Su ministerio se distinguió por una particular atención a los más pobres y marginados”, afirmó.

Al contrario de la mayoría de los mártires proclamados por la Iglesia en el curso de los siglos tras haber sido asesinados a causa de su fe cristiana, Romero fue reconocido mártir por su papel social y político, por su defensa de los pobres y olvidados, por su afán de justicia.

Según el pontífice, el nuevo beato recuerda a la Iglesia cómo tiene que ser en “El Salvador, en América y en el mundo entero: “rica en misericordia” y una “levadura de reconciliación para la sociedad”.