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Sábado, 23 de Noviembre del 2024
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Policía asesina a uno de los criminales más buscados en Colombia Cla Usuga “010”

Bogotá.-

Colombia

Jhon Jairo Álvarez Buelvas, alias “010”, uno de los veinte criminales más buscados por las autoridades colombianas, murió en un enfrentamiento con la Policía en el selvático departamento del Chocó (oeste), informó este miércoles el presidente del país, Juan Manuel Santos.

El delincuente pertenecía al Clan Úsuga, el más temido cartel de las drogas del momento de Colombia. “¡Contra el crimen somos efectivos! fue neutralizado alias 010, uno de los 20 más buscados del Clan Úsuga”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter. En el mensaje, que incluía una foto de Álvarez, se precisó que los hechos ocurrieron “en cercanías a Istmina”, un municipio del Chocó – donde se dedicaba a actividades como quema de buses y vehículos de carga, intimidación de comerciantes, minería criminal y proxenetismo en la región-, y que “010” era el “encargado de controlar el narcotráfico” en esa zona, destinado a financiar la banda criminal.

Por su parte, la Policía indicó a medios que el criminal es señalado como responsable de la muerte de policías y soldados, así como de coordinar la minería ilegal en la zona y abuso sexual a menores. Según explicó el director Antinarcóticos de la Policía, general José Ángel Mendoza, Álvarez y dos de sus escoltas murieron durante un enfrentamiento con los uniformados en Istmina, donde fueron interceptados cuando viajaban en motocicleta.

Mendoza destacó que “010” tenía un amplio historial en cuanto abuso de niñas de entre 11 y 14, a las que “llevaba mediante engaños a los campamentos”, en tanto que presionaba a los padres para que no denunciaran ante las autoridades. Según los uniformados, “010” era el tercer cabecilla principal del Clan Úsuga en Chocó.

Por el máximo jefe del Clan Usuga, Dairo Antonio Usuga David, alias “Otoniel”, las autoridades de Estados Unidos ofrecen una recompensa de hasta 5 millones de dólares. Las bandas criminales narcoparamilitares surgieron hacia 2004 cuando muchos integrantes de las llamadas Autodefensas Unidas de Colombia se resistieron a desmovilizarse y a abandonar la criminalidad.