1. Skip to Menu
  2. Skip to Content
  3. Skip to Footer
Sábado, 23 de Noviembre del 2024
| 1:16 am

Síguenos en Las Americas Newspaper Facebook Las Americas Newspaper Twitter Las Americas Newspaper Google Plus

Roy Moore padece el “síndrome de Mike Tyson”

Por: Humberto Caspa, Ph.D., es profesor e investigador de Economics On The Move. E-mail: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Washington DC.-

Muchas personas adeptas al boxeo recuerdan aquel 11 de febrero de 1990, fecha en que James “Buster” Douglas noqueó a Mike Tyson en el décimo round ante un público atónito del Dome de Tokio, Japón. Las tiendas de apuestas de Las Vegas daban a Tyson un favoritismo de 42-1 sobre Douglas.

Sin embargo, el indestructible Tyson fue abatido, golpeado y derribado en la lona por un desconocido de Columbus, Ohio, quien al final de la pelea levantó las manos en señal de victoria, convirtiendo este choque en la pelea boxística más sorprendente de todos los tiempos.

Lo que pasó ese día en Japón, puede llegar a suceder en 12 de diciembre en las elecciones de Alabama.

El republicano Roy Moore y el demócrata Doug Jones se encontrarán frente a frente en una de las peleas políticas para el Senado más importantes de los últimos tiempos. Los republicanos como Moore son normalmente favoritos para ganar elecciones senatoriales en un estado que, desde hace 20 años, ha elegido a candidatos pertenecientes a la esquina de los conservadores.

Los demócratas como Jones están ahí para perder. En las elecciones presidenciales de 2016, Hillary Clinton apenas pudo alcanzar el 34% del voto general de Alabama, a pesar de que en este estado existe un gran porcentaje de votos afroamericanos que, usualmente, se perfilan hacia la banda demócrata que a la republicana. Hillary sólo consiguió el 15% del voto estadounidense- europeo de Alabama.

En este sentido, Alabama es considerado como un estado conservador, altamente religioso y tradicionalista. A pesar de que la discriminación institucional es cosa del pasado, los grupos afroamericanos siguen siendo aglutinados en sus propios resguardos socio-económicos y las poblaciones blancas continúan viviendo auto-aislados en lugares de estratos de clase media-alta.

Hasta recientemente, el choque político entre estos dos contendientes parecía ser disparejo, hasta que surgieron los “trapitos sucios” de Moore.

En un reportaje espectacular, el Washington Post puso en tela de juicio su historial y cuestionaron su idoneidad conservadora.

A inicios de 1979, a sus 32 años, cuando desempeñaba el cargo de Asistente del Fiscal de Distrito, Moore molestó sexualmente a Leigh Corfman, entonces una adolescente de 14 años. De acuerdo al testimonio de Corfman, en una oportunidad Moore la llevó a su casa, se desvistió delante de ella, la tocó la parte exterior de sus senos y condujo sus manos hasta sus genitales masculinos. Otras dos mujeres también comentaron que Moore las molestó de una manera muy similar.

Al igual que Tyson, Moore muestra vulnerabilidades antes de las elecciones del 12 diciembre. El golpe certero está en el aire y está presto a noquearlo.