Ejecutan a mexicano Hernández con injección letal en Texas
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- Categoría: Nacional
- Publicado el Domingo, 13 Abril 2014 6:25am
Hunstville.-
El mexicano Ramiro Hernández enfrentó la inyección letal pidiendo perdón a la familia de la víctima Glen Ernst Lich. Se despidió diciendo que “amaba a su familia” y diciendo “que fue feliz hasta el final”, también dijo que “Dios es el único testigo de lo que pasó esa noche”.
“Gracias Dios estoy yendo contigo”, esas fueron sus últimas palabras. El mexicano pasó sus últimas horas de vida limpiando sus zapatillas, hablando con su familiares, en particular su hermano Jorge y comiendo magdalenas de chocolate. Esa fue la manera en que escogió vivir para luego morir.
Su última visita fue uno de sus hermanas y se registró a las 11:15AM. Tras eso fue trasladado a la Unidad de las Paredes en la Prisión de Huntsville. La inyección del anestésico Pentobarbital entró a sus venas a las 6:17PM, 11 fueron los minutos de agonía hasta dar un respiro final.
Según el vocero de la prisión de Huntsville, Jason Clark “no hubo señales de dolor y Hernández quedó inconsciente casi de inmediato”. Su hermano Jorge será quien recoja su cuerpo, con el destino final de Tamaulipas.
Cuando faltaban pocos minutos para la ejecución, algunas personas en contra de la pena de muerte, comenzaron a protestar y pidieron el fin de esta práctica que en Texas ha cobrado 513 vidas desde su inicio. “¡Paren las ejecuciones!! ¡es barbárico!! alegaban manifestantes de Texas Death Penalty Abolition Movement.