1. Skip to Menu
  2. Skip to Content
  3. Skip to Footer
Sábado, 23 de Noviembre del 2024
| 6:33 am

Síguenos en Las Americas Newspaper Facebook Las Americas Newspaper Twitter Las Americas Newspaper Google Plus

Modernizar a las elecciones primarias

Por: Humberto Caspa, Ph.D., es profesor e investigador de Economics On The Move. E-mail: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Washington DC.-

Durante las últimas semanas, se ha dicho mucho de la falta de democratización en elproceso de las elecciones primarias. Sin embargo, con todos los problemas que se visualizaen su interior, la forma de elección en base a un Sistema de Delegados es la menos problemática de todo el continente Americano. En otros sistemas políticos, como en la mayoría de los países latinoamericanos, los dirigentes de los partidos políticos eligen al candidato de su preferencia de acuerdo a sus propios criterios y caprichos. En algunos casos no existe ningún un mecanismo de control. Los presidentes nombran a sus propios sucesores. En este sentido, el “dedazo” de México fue, en su momento, una de las formas más claras de nepotismo y corrupción alrededor del nombramiento del líder más importante de este país.

Hoy, este tipo de nombramientos ha desaparecido, pero otras prácticas similares al “dedazo” todavía permean el nombramiento de dirigentes políticos en México. En otros casos como en Cuba, la dirigencia política y, por ende, el liderazgo de este país es transferido de un pariente a otro. Fidel Castro le otorgó a su hermano Raúl la “comandancia” de su país, a pesar de que había personas más capacitadas para ejercer este rol. En Argentina, el expresidente Néstor Carlos Kirchner dejó el camino despejado paraque su esposa, Cristina Fernández de Kirchner, tome la batuta de su partido político. Con elapoyo de la maquinaria política de su esposo, a Cristina se le fue más fácil llegar a la Casa Rosada.

En este sentido y contrario a lo que sucede en América Latina, el Sistema de Delegados por lo menos permite la participación de una parte del electorado nacional (demócrata y republicano) en la elección del candidato oficial a la presidencia. El electorado del Partido Demócrata o Republicano elige indirectamente a su candidato presidencial por medio de elecciones internas y caucus. En el peor de los casos, el nombramiento lo hacen sus dirigentes políticos como sucedió en Colorado y Wyoming.

Los delegados son elegidos de la siguiente manera. En el caso del Partido Demócrata, de un total de 4.766 delegados, 4.051 son elegidos por el electorado demócrata;es decir 85% provienen a través de la venia de los votantes. Mientras que 715 delegados (15%) toman el nombre de “Superdelegados”, quienes son personas afiliadas a la dirigenciadel partido político o fueron personajes importantes en el pasado. Es decir, de los 715 superdelegados, 434 pertenecen al Comité Nacional del Partido Demócrata; 20 son líderes distinguidos, como expresidentes, vicepresidentes, exlíderes congresistas y exdirigentes; 193 miembros de la Cámara de Representantes del Congreso; 47 miembros del Senado; 21 gobernadores pertenecientes a este partido político.

El Partido Republicano funciona de una manera similar, aunque confieren un número menor de delegados por estado.

Sin embargo, el Sistema de Delegados es una forma anticuada de elegir al candidatoa la presidencia y no es digno de la democracia más importante del planeta. Lo más aconsejable es que los dos partidos políticos permitan la elección directa de los candidatos ala presidencia. Uno de los requisitos más importantes debería ser que los votantes tengan que estar adscritos a su partido político antes de sufragar su voto en las primarias electorales. A los votantes “independientes” se les debe negar este derecho.