Presidente ejecutivo de Wells Fargo deja el cargo tras el escándalo por los millones de cuentas bancarias
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- Categoría: Nacional
- Publicado el Lunes, 17 Octubre 2016 1:32am
Washington DC.-
John Stumpf, presidente ejecutivo de Wells Fargo, dejará el cargo tras el escándalo por la creación de unos 2 millones de cuentas bancarias y tarjetas de crédito que los clientes no habían pedido. Tras haber despedido en septiembre a miles de empleados por la creación de cuentas bancarias falsas para inflar sus ventas, Wells Fargo dijo este miércoles que su presidente ejecutivo, John Stumpf, dejó el cargo.
“He decidido que lo mejor para la compañía es que dé un paso al costado. No conozco a un mejor individuo para que lidere esta empresa hacia adelante que Tim Sloan”, dijo Stumpf en un comunicado refiriéndose a quien era hasta el momento el principal funcionario de operaciones del banco.
La salida de Stumpf de uno de los bancos más grandes de Estados Unidos se da a semanas de haber sido vapuleado en una sesión en el Congreso. En ella, el ejecutivo de 63 años, que también ejercía el cargo de presidente de la entidad financiera, culpó a sus empleados por la creación de unos 2 millones de cuentas bancarias y tarjetas de crédito a nombre de clientes que no las habían solicitado. El ejecutivo dijo que los empleados que incurrieron en esta mala práctica, que fue sancionada con una multa histórica de 100 millones de dólares por las autoridades del sector, no compartían la ética del banco y representaban “solo” el 1% de su fuerza laboral.
En esa sesión, Stumpf recibió las palabras más duras de la senadora Elizabeth Warren, quien le enrostró en ese momento que “debería dimitir, devolver el dinero que ganó mientras esta estafa ocurría y ser investigado criminalmente por el Departamento de Justicia y la Securities and Exchange Commission”. \
Aunque no han sido revelados los términos monetarios del retiro de Stumpf, el ejecutivo habría dejado el cargo con una compensación superior a los 100 millones de dólares, según un análisis de Fortune.
Con la creación de esas cuentas, los empleados del banco inflaban sus ventas mientras que los clientes quedaban a merced de los cargos por servicio que estas generaban. Incluso afrontaban sobregiros por no tener el saldo necesario para cubrir los cargos por servicio.