Comisionado de la FDA, habla de la labor de impulsar el mercado estadounidense de los mariscos
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- Categoría: Salud
- Publicado el Lunes, 9 Abril 2018 11:26pm
Reconozco que es mucho el trabajo que media entre la captura de un pez o la cosechar de un marisco y su llegada a nuestra mesa para el inocuo deleite de nuestras familias. El proceso de llevar el pescado a los estadounidenses comienza con los productores y pescadores, e involucra la participación de desbulladores, procesadores, distribuidores y minoristas, quienes, todos, colaboran con los organismos de control para asegurar el cumplimiento de las normas de inocuidad alimentaria, ya sea que haya sido capturado en el país o en el extranjero.
Estas cadenas de abasto son cruciales porque la industria pesquera estadounidense aporta más de 90 mil millones de dólares a la economía nacional, según el Instituto Brookings, y mantiene alrededor de 1.5 millones de puestos de trabajo. Aproximadamente tres cuartas partes del poder adquisitivo y más del 95 por ciento de los consumidores del mundo están allende las fronteras de los Estados Unidos. Eso hace del comercio un motor significativo del crecimiento de nuestra economía y un factor importante para las empresas estadounidenses.
Esto es particularmente cierto en los que a los pescados y mariscos se refiere. Los productos pesqueros representan más de 5 mil millones de dólares del valor total de las exportaciones estadounidenses, y aproximadamente una tercera parte de eso es en mariscos. Con una participación del 6 por ciento del comercio mundial, los Estados Unidos representan el sexto proveedor de pescados y mariscos para el mercado mundial. Más aun, las empresas estadounidenses han experimentado un crecimiento constante en las exportaciones de productos del mar en la última década, y uno de sus principales mercados de exportación es la Unión Europea (UE).
Sin embargo, durante casi ocho años, los Estados Unidos y la Unión Europea no han entablado ningún tipo de comercio de moluscos crudos, lo cual significa que los consumidores se han perdido de opciones en el mercado, y las empresas tanto estadounidenses como europeas, de nuevas oportunidades de negocios. La Comisión Europea (CE) no ha permitido la importación de mariscos a la Unión Europea desde 2010, y la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) no ha permitido la de moluscos vivos, frescos o congelados provenientes de Europa desde los 1980.
A fin de vencer este obstáculo comercial y asegurar la inocuidad de los mariscos importados en ambos mercados, los Estados Unidos y la Unión Europea han venido trabajando de manera activa para llevar adelante un proceso de determinación de equivalencia. Es por eso que me complace anunciar el día de hoy que la FDA y la Unión Europea han puesto en marcha medidas que permitirán la venta de moluscos —o lo que se conoce como almejas, mejillones, ostras y vieiras o callos de hacha, entre otros— entre los Estados Unidos y la Unión Europea por primera vez en años. En particular, la FDA ha publicado una propuesta de determinación al efecto de que los controles de inocuidad de la Unión Europea son equivalentes a los de los Estados Unidos.